Sacerdote argentino promotor del "matrimonio" homosexual desafía a la Iglesia

 

Será sometido a un juicio canónico, pero se niega a dejar de celebrar misa

CÓRDOBA, martes 13 de julio de 2010 (ZENIT.org).- El sacerdote argentino conocido por promover las uniones homosexuales ha anunciado que no obedecerá a la orden cautelar de su obispo que le ha prohibido ejercer el ministerio sacerdotal.

"Este fin de semana voy a celebrar misa, salvo que me metan preso", anunció el padre José Nicolás Alessio, quien en contra de las enseñanzas de la Iglesia respalda la reforma al Código Civil que se votará este miércoles en el Senado para permitir el erróneamente llamado "matrimonio" homosexual.

Este martes la arquidiócesis de Córdoba anunció que su arzobispo, monseñor Carlos José Ñáñez, inició el proceso canónico correspondiente ante el tribunal eclesiástico al padre Alessio, de 52 años, párroco de San Cayetano, en el barrio Altamira de la capital cordobesa.

Mientras se desarrolla el juicio, como medida cautelar, el arzobispo le prohibió el ejercicio público del ministerio sacerdotal. Por lo tanto el mencionado sacerdote no podrá celebrar públicamente la santa misa ni administrar los sacramentos de la Iglesia, por lo que en la práctica no podrá actuar como párroco.

Monseñor Ñáñez ordenó este lunes enviar un comunicado a todos los sacerdotes que tienen alguna responsabilidad pastoral o eclesial en la arquidiócesis de Córdoba en el que "manifiesta claramente que, luego de haber agotado todos los medios de solicitud pastoral para que el presbítero José Nicolás Alessio, se enmendase y retractase públicamente de las declaraciones realizadas por él mismo a favor del presunto 'matrimonio' entre personas del mismo sexo, contrariando la Enseñanza y el Magisterio de la Iglesia Católica, y habiendo el antedicho presbítero negado toda posibilidad de modificación de su obrar, ha decidido iniciar el proceso eclesiástico correspondiente en el Tribunal Interdiocesano de Córdoba para que toda actuación se realice conforme al Derecho eclesial vigente, estableciendo una medida cautelar en la que formalmente "le prohíbe el ejercicio público del ministerio sacerdotal".